Pepe Mel le sustituirá hasta final de temporada.
La destitución de Gaizka Garitano como entrenador del Almería ha sido oficializada debido al pobre desempeño del equipo en la temporada actual de La Liga. Con solo 10 puntos y en última posición, el club ha optado por Pepe Mel como sucesor para los últimos 10 partidos restantes. Aunque la decisión sorprende dado el inminente descenso del equipo, la dirección ha optado por un cambio tras la difícil gestión de Garitano, quien solo pudo obtener siete puntos de 57 posibles, principalmente a través de empates.
A pesar de las buenas sensaciones en el juego del Almería, su defensa frágil ha sido una constante preocupación, con 57 goles en contra, la cifra más alta junto con el Granada en la liga. Garitano también enfrentó problemas de relación con jugadores clave, lo que exacerbó la situación. La esperanza de una victoria se desvaneció en el último partido ante el Sevilla, a pesar de una destacada actuación.
El club inicialmente planeaba mantener a Garitano hasta el final de la temporada, pero su discurso derrotista y la falta de cohesión con la plantilla llevaron a una rápida decisión de destitución. La gestión del equipo por parte del propietario saudí Turki Al-Sheikh ha sido objeto de críticas, ya que se ha centrado más en generar plusvalías con ventas de jugadores que en desarrollar un proyecto deportivo sólido.
El ambiente de trabajo, dirigido por el administrador Mohamed El Assy, ha sido cuestionado, especialmente tras la partida de Rubi, el técnico de la temporada pasada, quien logró mantener al equipo en Primera a pesar de las dificultades. En resumen, la temporada ha sido un desastre para el Almería, con la destitución de Garitano como un intento desesperado por cambiar el rumbo del equipo en los últimos encuentros de la campaña.