Si debes saber algo de lo que pasó anoche, es esto.
1. Kuminga: 24 puntos, póster y un ¡te lo dije! a Kerr
El 5 de enero, cuando la temporada de los Warriors parecía abocada al fracaso (15V – 18D), Jonathan Kuminga hizo algo muy poco habitual: cuestionar públicamente su falta de minutos. Su entrenador, en lugar de condenarle al ostracismo, decidió darle la oportunidad de respaldar sus críticas con acciones, y mejor no le podría haber salido. Desde entonces, ha elevado sus promedios ostensiblemente tanto en minutos (22 a 31) como en puntos (12.6 a 20.4). Los Warriors marchan 15-9 desde entonces y el alero se ha convertido en el escudero perfecto de Curry. Ser insolente a veces funciona.
2. Con este nivel de Giannis, no podemos descartar a Milwaukee
Siguiendo con la tónica de revertir tendencias, los Bucks llegaban al parón del All-Star inmersos en un mar de dudas: AJ Griffin destituido tras menos 4 meses en el cargo, defensa cuestionable y un inicio incierto bajo las órdenes de Doc Rivers. Como comentamos ayer, desde entonces todo parece haber hecho click y ayer sumaron una victoria más. Giannis fue el principal artífice de la victoria, y con sus 46 puntos y 16/22 en tiros añade su 19º partido con +40 puntos y +70% en tiros de campo. Igual que Davis anoche, deshizo el empate con Shaquille O’Neal para convertirse en el líder de los últimos 50 años en esta categoría. Mantener 2 récords durante más de una década y que sean batidos en menos de 24h es cuanto menos sorprendente.
3. Ingram o Zion, el debate sin respuesta
Los dos aleros de Pelicans cuentan con adeptos que defienden a cada y espada que su favorito es el auténtico líder del equipo. A decir verdad, su rendimiento ha sido similar desde hace varios años, y ninguna de las opiniones es descabellada. Si preguntamos a los fans de Pacers, la respuesta la tendrán clara: Brandon Ingram. El nº13 de New Orleans ha sumado 64 puntos, 14 rebotes y 10 asistencias en estos 2 recientes partidos ante ellos, y dejado su sello con esta impresionante jugada.
4. ¿Alguien puede evitar que Monk se convierta en el 6º Hombre del Año?
Con 4 minutos y medio por terminar el tercer cuarto, Malik Monk ingresaba en el partido y acto seguido fallaba un intento de bomba: sólo llevaba 4 puntos y un pobre 2/8 en tiros. Nadie hubiera predicho que el escolta fuera a ser el jugador en decidir el partido. Sin embargo, así fue. Monk acabó con 39 puntos, incluyendo 6 de los 9 puntos de su equipo en la prórroga, y Sacramento sumó su victoria de más relumbre en la cancha de Minnesota.
5. Show inesperado en Memphis (no, no estamos refiriéndonos al partido)
El All-Star marca siempre el punto de inflexión de la temporada. Hasta esta fecha, hay un acuerdo tácito entre Adam Silver (comisionado y mandamás de la NBA) y las gerencias de los equipos en reconstrucción de que se busca ganar y competir todos los partidos. Una vez levantada la veda, los esfuerzos se centran en dar minutos a los jóvenes y descansos a los veteranos. Si esto contribuye a perder más partidos, pues mejor que mejor. Es por eso que un duelo entre Memphis y Portland jamás entraría en esta columna. Sin embargo, ayer era el cumpleaños de Grizz (sí, las mascotas de la NBA tienen su propio cumpleaños) y varias mascotas oficiales (no cualquiera está autorizado para meterse bajo un disfraz, la idiosincrasia americana es cuanto menos “curiosa”) de diferentes equipos fueron a celebrarlo con él… al más puro estilo WWE. Para esto, pagar una entrada sí que merece la pena.