La superestrella de los Lakers estalla en las redes sociales al enterarse de que los expertos no dan como seleccionado a su hijo en el Draft de 2024.
Es por todos conocido que Lebron James es un grandísimo jugador, de los más grandes que han jugado nunca a esto.
Pero también pasará a la historia como uno de los jugadores que más excusas ha puesto en toda su carrera.
Obviamente no está al nivel DIOS en excusas, como el entrenador del Barcelona Xavi Hernández, pero no se queda corto.
Tras llevar “hypeando” a su hijo Bronny casi desde que era un niño, parece que no le ha hecho mucha gracia que todos los expertos se pusieran de acuerdo en decir que no tenía nivel para ser seleccionado en el Draft y entrar a la NBA.
Los números del chaval este año en su debut universitario no son flojos, son flojísimos. Nadie con ese desempeño en la pista, sin tener detrás el apellido James, tendría ninguna opción de acercarse a la mejor liga del mundo.
LeBron lleva tiempo haciendo chantajes a las franquicias intentando encajar a su hijo en la NBA. Bronny James realmente tiene pinta de que va a dar más pena que el buen chico pero horrible jugador LiAngelo Ball.
Lavar Ball intentó encajar en la liga a su tercer hijo, aprovechando que Lonzo y Lamelo salieron jugadores TOP, pero LiAngelo está mas cerca de ser un bailarín de TikTok que un jugador de baloncesto.
LiAngelo ahora mismo está jugando en Jalisco, de la desconocida liga mexicana.
A todo esto, LeBron ha dicho que quiere jugar con su hijo en la NBA, y convertirse en el primer padre de la historia que comparta minutos con su hijo en la liga. Muchas franquicias están dispuestas a aceptar al paquete de Bronny para contar con los últimos coletazos de la carrera de su padre.
Nadie duda de que cuando se retire LeBron, esas franquicias mandarán al chaval a jugar a Taiwán con Howard y Cousins. Asimismo, siempre tendrá la opción de irse a Jalisco a probar suerte en el baloncesto mexicano. Cuando menos, es seguro que comerá los mejores tacos de su vida.