La victoria de Kansas City Chiefs frente a los San Francisco 49ers por 25-22, en el tiempo extra, marcó un antes y un después en la televisación de los Estados Unidos.
La electrizante final del Super Bowl LVIII que conquistaron los Kansas City Chiefs por 25-22 frente a los San Francisco 49ers, con Taylor Swift como estrella en las gradas, protagonizó un nuevo récord para una retransmisión televisiva en la historia de Estados Unidos.
El mega evento de la NFL tuvo una audiencia de 123,4 millones de espectadores, superando los 115,1 millones de la edición pasada, en la que también se coronaron los Chiefs pero en esa ocasión ante los Philadelphia Eagles.
El Super Bowl de 2024 solo tendría por delante el alunizaje de Apolo 11 en 1969 (entre 125 y 150 millones de personas en el país de América del Norte).
No obstante, y al margen de que en ese caso solo se trata de estimaciones, la llegada del ser humano a la Luna se vio a través de diferentes cadenas por lo que la comparación con el Super Bowl de 2024, que en Estados Unidos se emitió exclusivamente a través de CBS y sus plataformas y canales complementarios, no sería muy precisa.
Los datos de Nielsen Fast National y Adobe Analytics, divulgados por la NFL este lunes en un comunicado, reflejaron que 120 millones de personas vieron el partido a través de CBS.
El resto lo disfrutaron a través de Paramount+, Nickelodeon, Univisión, CBS Sports y NFL+. Concretamente, los 2,2 millones que lo vieron en Univisión supusieron un nuevo récord para un Super Bowl en una cadena en español.
El Allegiant Stadium de Las Vegas presenció el segundo título seguido para la dinastía del equipo que lidera Patrick Mahomes y su tercer anillo en los últimos cinco años.
La final, que se resolvió en el tiempo extra, contó también con el aliciente de tener entre el público a Taylor Swift, cuyo muy mediático romance con Travis Kelce, jugador de los Chiefs, ha sido una de las grandes historias de la NFL esta temporada.