Los actuales números 1 pasaron por encima en 53 minutos (6-0 y 6-4) de una pareja legendaria que se despidió en Acapulco tras cuatro temporadas y tres torneos
El mejor partido de pádel que puede verse en el planeta despidió en laciudad que vio nacer a este deporte, Acapulco, a una pareja legendaria: Juan Lebrón y Alejandro Galán. Los españoles, so sí, no pudieron culminar su último baile con triunfo, y la culpa de ello la tuvo una apisonadora conducida por Arturo Coello y Agustín Tapia. Los actuales reyes de este deporte se exhibieron con un contundente 6-0 y 6-4 en 53 minutos que les puso en bandeja su segundo título de 2024.
Los actuales números 1 comenzaron el partido con un ritmo arrollador que desarboló por completo a sus rivales, impotentes ante el vendaval de pádel que se les venía encima. Quién sabe si fueron los nervios, quién sabe si fue el fantástico estado de forma de Coello y Tapia o una combinación de ambas cosas. La realidad es que el reloj marcaba ¡¡17 minutos!! y el marcador era de 6-0. Era el tercer ‘rosco’ de los Golden Boys en apenas dos semanas (en Doha ante Paquito/Sanyo y Yanguas/Garrido y el de este choque).
La cara de incredulidad de Lebrón y Galán traspasaba fronteras y obligaba a un reset en el segundo asalto. ).De primeras, y con su servicio a favor, los españoles lograron estrenar su casillero y quitarse un peso de encima. “Paso a paso, lo que hemos hablado. Sabemos lo que tenemos que hacer”, les decía Jorge Martínez en el primer paso por banquillos.
Ya llovía menos para el andaluz y el madrileño, que poco a poco fueron metiéndose en dinámica, alargando los puntos con buenos globos y haciendo dudar a sus contrincantes en varios momentos. Sin embargo, Coello y Tapia se pusieron el mono de trabajo, entendieron lo que requería esta fase del encuentro y, tras una rotura en el quinto juego, metieron la directa hasta el 6-4 definitivo.
La semana que viene será el P2 de Venezuela, en Puerto Cabello, y allí Ale Galán y Juan Lebrón estarán en diferentes lados de la pista.Chingotto y Momo (éste, sólo para este torneo con el Lobo) serán sus compañeros, dando paso así a una nueva era para dos jugadores que han marcado una época en el pádel. 81 torneos, 33 títulos y una etapa gloriosa que ya ha bajado el telón en México.
Por su parte, Coello y Tapia alargaron las fantásticas sensaciones mostradas en Doha hace dos semanas y sumaron el segundo al casillero. Tienen ahora por delante el gran reto de salvaguardar la corona de reyes del pádel ante un escenario cambiante en varios de sus rivales, quienes tendrán que trabajar a destajo si quieren desbancar a un dúo que parece no tener techo. El futuro y el presente son suyos.